Linfa

Linfa

El término linfa, también llamado humor, en botánica, significa un líquido propio de las plantas.
La linfa tiene una composición variable según las necesidades de la planta, la temperatura, la variabilidad de las estaciones y otros factores y se distribuye dentro de la planta como savia cruda a través del xilema y como savia procesada a través del floema.
La linfa bruta o xilemática es aquella parte constituida principalmente por sales minerales y agua; fluye desde las raíces hacia arriba a través de los vasos conductores xilemáticos con una velocidad de unos 15 metros/hora. Las venas se ramifican en cada hoja organizando los vasos del xilema cerca de cada celda, asegurando así un sistema de distribución eficiente. La savia silemática sube contra la fuerza de la gravedad desde las raíces hacia las hojas y brota gracias a dos mecanismos: la presión radicular y la tracción.
La linfa procesada o flemática es una solución acuosa caracterizada por la presencia de sacarosa, cuya concentración puede alcanzar el 30% en peso de la solución total. La linfa flemática también puede contener aminoácidos, minerales y hormonas. Contrariamente a la unidireccionalidad del transporte de la linfa silemática, la dirección en la que se mueve la linfa flemática es más variable (translocación).

La savia bruta también se denomina savia ascendente ya que su movimiento, como se mencionó, procede desde las raíces hasta las hojas y los ápices del tallo por medio de elementos conductores xilemáticos (tráqueas y traqueidas), distribuyendo sales inorgánicas para ser procesadas.
La savia procesada también se denomina descendiente ya que su movimiento procede desde las hojas hasta las raíces por medio de los tubos cristalinos del floema, transportando sustancias orgánicas procesadas incluyendo azúcares y aminoácidos.
En la planta, por tanto, hay dos regiones y dos corrientes de transporte. Las dos regiones son concéntricas y coaxiales. La ubicación de las dos regiones está bien identificada en las plantas leñosas, donde el xilema es la masa de madera con sus círculos de crecimiento anual, mientras que el floema se encuentra en la porción más externa de la corteza. Un ejemplo de savia ascendente lo da el llamado ‘llanto’ de la vid; ejemplos de savia descendente son el látex que brota al cortar la corteza de ciertos árboles (planta del caucho, Hevea brasiliensis) o la pared de ciertas frutas (cápsulas de amapola) o al cortar la fruta de las plantas (higo). El problema del transporte de agua y sales a gran altura, como ocurre en las plantas arbóreas, se explica ahora con la teoría de la cohesión-tensión para el transporte de agua.