20 Años de sostenibilidad
20 Años de sostenibilidad
Diciembre 2004 – diciembre 2024.
Un mundo ecosostenible cumple 20 años, durante el cual hemos producido 6243 contribuciones (son 6244), piezas científicas publicadas, para uso y consulta de investigadores y estudiosos, pero también fichas prácticas para quienes se acercan por primera vez al complejo mundo de la naturaleza. de la ecología, de las leyes que rigen la realidad en la que estamos inmersos y de la que formamos parte.
44 categorías y numerosas páginas centrales que desarrollan todos estos temas; con notas bibliográficas, referencias, informes. Pero, sobre todo, el objetivo no es utilizar el lenguaje para crear noticias o primicias.
La comunicación tiene y esperamos que tenga un solo propósito: hacer reflexionar a las personas sobre la manera de estar en el planeta, de ocuparlo, de amarlo, de mirar a los demás como parte de un solo organismo.
Todo ello ha provocado un creciente interés por esta web, con un notable aumento de las visitas procedentes de Italia pero aún más, sobre todo, de América: casi 7.000.000 de páginas vistas (de las cuales sólo 1.703.374 en 2023), con visitas de todas partes del mundo. y con un aumento paulatino, a partir de 2007, hasta hoy, de los países latinoamericanos, así como de España, pero en general de todos los demás.
Todo esto es fruto de un trabajo hecho de pasión, perseverancia, atención, hacia todos los temas ecológicos pero en una dimensión ecológica global: la ecología social y la ecología ambiental.
Sin embargo, nuestro punto de vista quiere nutrirse de nuevas formas y dimensiones.
Un nuevo antropocentrismo, donde la humanidad se convierte en artífice de un nuevo renacimiento del pensamiento, de la forma de actuar y relacionarse con los demás; de la manera de estar en la Tierra.
Podría parecer una contradicción, pero estamos convencidos de que esta época, aunque contaminada (como en el escape de un coche) por múltiples residuos, contiene todos los elementos para que la historia dé ese salto de calidad que los siglos pasados han metabolizado.
Como afirmó Leibniz, la naturaleza “no da saltos”, es decir, las relaciones entre las cosas son de continuidad y no de diversidad y esto abre escenarios culturales, sociopolíticos y humanísticos completamente nuevos. De la misma manera, la historia no es discontinua ni está formada por momentos negativos. Hay momentos con más “desperdicio” y momentos con mayor visibilidad de sus frutos (metabolitos).
La historia se está volviendo adulta y estamos convencidos de que a pesar de la negatividad, los momentos difíciles y todo lo que nunca quisiéramos esperar, se vislumbran momentos de gran florecimiento en el horizonte.
Quizás esté llegando a su fin ese periodo que en 1992 Andrew Revkin bautizó como Antroceno y que más tarde se convirtió, gracias al Premio Nobel de Química Paul Crutzen y Eugene F. Stoermer, en Antropoceno.
Como ocurre con las tormentas, el final de un momento meteorológico se anuncia con grandes trastornos barométricos y atmosféricos pero, al final, el tiempo adopta una nueva forma.
Predecimos que en la nueva era la humanidad será perfectamente innata; orgánicamente sincrónica con los principios y reglas de la naturaleza, con una economía, una socialidad, una tecnología que se polarizan perfectamente con las leyes de la Naturaleza: nacerá el NATUROCENO, tal como lo definimos en 2020, donde la nueva civilización, la que nace de En las cenizas de la paz de hoy, también encontraréis esa paz, perseguida durante milenios pero nunca alcanzada, porque está en guerra con la naturaleza que también está dentro de nosotros.
Guido Bissanti