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Cómo se propaga la menta

Cómo se propaga la menta

La menta (Mentha × piperita) es una planta herbácea perenne, estolonífera, fuertemente aromática, de la familia Labiate y es un híbrido de Mentha aquatica y Mentha spicata.
Esta planta es originaria de Europa y el cultivo se ha extendido por todo el mundo.
La menta, como todas las mentas, se puede reproducir fácilmente cortando las puntas o plantando trozos de estolones enraizados o dividiendo grupos. También se puede cultivar en macetas o en plena tierra.
En general, es una planta fácil de cultivar, siempre que encuentre un poco de zona sombreada y húmeda.
Sin embargo, para conocer los detalles de la técnica de cultivo, consulte la siguiente hoja.

Propagación por esquejes
La multiplicación se realiza mediante esquejes que se realizarán tomando una parte terminal de una rama de menta de unos 8-10 cm de largo.
Después de haber tomado esta porción de la rama, se deben quitar las hojas inferiores, dejando solo un par de pares al final. Si las hojas son muy grandes conviene cortarlas por la mitad para reducir la transpiración en la primera fase de enraizamiento.
En este punto se puede implantar este esqueje ya sea en recipientes pequeños o en un semillero con poca profundidad, haciendo agujeros.
El tallo de la menta debe plantarse de modo que su extremo inferior llegue al fondo del recipiente.
En este punto es necesario regar con un nebulizador para humedecer constantemente el suelo evitando que se produzca estancamiento.
Durante las dos o tres primeras semanas es recomendable no exponer estos esquejes a la luz solar directa, solo a partir de la segunda semana, cuando ya deberían salir los primeros folíolos, se pueden ir aumentando gradualmente las horas de sol y seguir manteniendo la tierra húmeda.

Propagación por rizomas o división de mechones –
En propagación por rizomas o división de matas es necesario tomar porciones de unos pocos cm de rizoma (estolones) o matas con rizomas y ramas que se pueden plantar directamente en un suelo regando con los mismos métodos vistos anteriormente y cuidando el primeras dos semanas para no exponerse excesivamente a la luz solar directa.
Tanto para la propagación por esquejes como por rizomas o división de mechones, el período óptimo es finales de septiembre pero también se puede optar por principios de primavera.
El traslado de las plántulas obtenidas por esquejes o división de mechones debe operarse solo cuando comiencen a formarse las hojas nuevas, lo que corresponde al enraizamiento de la planta.
Recuerda que al igual que otras plantas aromáticas que, en fase de cultivo pleno, si quieres obtener un aroma mayor, no debes exceder con riegos.




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