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Epifitas

Epifitas

El término epífito se refiere a una serie de plantas que viven en otras plantas, que normalmente usan como soporte pero no para obtener alimentos.
Los helechos, musgos, líquenes y otros organismos sésiles que no crecen en el suelo, sino que viven principalmente en troncos de árboles o ramas, especialmente en bosques tropicales y subtropicales, son plantas epífitas.
Las plantas epífitas también se llaman plantas aéreas.
Las plantas epífitas están presentes particularmente en los bosques tropicales donde la vegetación es tan densa y espesa que impide que la luz solar alcance sus capas más bajas, que permanecen perpetuamente en la sombra.
En estos hábitats, los árboles, para aprovechar la luz solar, se desarrollan en altura y esta característica es explotada por plantas epífitas que pueden lograr el mismo propósito. Este objetivo se logra utilizando los troncos o ramas muy altas de las plantas hospedadoras como un soporte al cual se anclan mediante raíces adhesivas o adheridas.
De esta manera, aunque viven en un ecosistema tan denso y sombrío, las plantas epífitas pueden capturar suficiente energía solar para llevar a cabo la actividad fotosintética necesaria; además, casi todas las plantas epífitas, incluso de diferentes maneras, son capaces de absorber y conservar el agua de lluvia. Entre las epífitas, las orquídeas epífitas, por ejemplo, retienen agua y nutrientes en sus tallos, mientras que otras aún extraen nutrientes de las raíces aéreas cubiertas por una sustancia absorbente específica.

En general, las plantas epífitas no tienen una actividad parasitaria en relación con las plantas sobre las que se apoyan, esto porque pueden absorber agua y sales minerales a través de la superficie de las hojas o a través de las raíces aéreas que también utilizan para anclarse a sus plantas. apoyo.
Un mecanismo que utilizan algunos epifitos es el de adaptar el sistema de hojas para capturar más y acumular agua de lluvia, mientras que otros tienen hojas cubiertas con pelos aplanados que, cuando se abren, permiten que la humedad se absorba del aire y evitan que se cierre. Evaporación durante períodos de sequía.
En otros casos, aunque más raros, en cuanto al muérdago, la planta epífita realiza una actividad real de parasitismo; En este caso, la planta perfora a través de las exoenzimas la corteza del árbol en el que vive y resta nutrición a la planta con sus órganos austori.
Debido a su ecología y biología particulares, las plantas epífitas se utilizan en análisis ecológicos, como bioindicadores o bioacumuladores, porque son independientes del sustrato en la acumulación de nutrientes. Este es el caso, por ejemplo, de briofitas y líquenes, que toman agua y otros nutrientes directamente de la atmósfera.




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