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Caliroa limacina

Caliroa limacina

La babosa del cerezo o del peral (Caliroa limacina Retz.) Es un pequeño himenóptero perteneciente a la familia Tenthredinidae.

Sistemática –
Desde un punto de vista sistemático, pertenece al dominio Eukaryota, Reino Animalia, subgrupo Eumetazoa, rama Bilateria, Phylum Arthropoda, Subphylum Tracheata, Superclase Hexapoda, parte de la naturaleza, a la vista de las partes, a la vez, a las partes. Tenthredinoidea, familia Tenthredinidae y por lo tanto para el género Caliroa y para la especie C. limacina.
El término Caliroa cerasi L. es sinónimo.

Distribución geográfica y hábitat –
Caliroa limacina es un himenóptero pequeño que se difunde un poco en todas partes en áreas con un clima templado y cálido donde, sin embargo, no causa daños significativos.
Este insecto vive en algunos árboles frutales, en particular pera y cereza; Más raramente en albaricoque, ciruela, almendra, espino, frambuesa y membrillo.

Morfología –
La babosa del cerezo o del peral es un pequeño himenóptero, cuyos adultos tienen un cuerpo negruzco brillante, que mide unos 4-5 mm de longitud, con una envergadura de 10 mm, transparente, con tonos oscuros claros en la parte media y con venas marrones.
Las larvas, debido a su apariencia, son similares a Limacce pequeña, de ahí el término Limacina, con el cuerpo mucilaginoso de color amarillo verdoso o púrpura, que tiende a ser transparente, lo que hace que las partes internas de color oscuro sean visibles. Estos tienen una forma claviforme, con un frente alargado y giboso con cabeza y patas negras. La larva alcanza los 8-10 mm de longitud.

Actitud y ciclo biológico –
La Caliroa limacina supera el invierno en el suelo en el estadio prepupa, protegida por formaciones sedosas.
En primavera aparecen los adultos, que son predominantemente femeninos, mientras que los machos son más raros. Las hembras maduras descansan en el período de mayo, utilizando el ovipositor robusto, debajo de la epidermis superior de la hoja y en correspondencia con los puntos de ovideposición, donde se desarrolla una pequeña burbuja lenticular.
De estos huevos tenemos la primera generación que dura todo el mes de junio.
Las larvas emergen después de 1-2 semanas, abriendo un espacio en la página superior y comienzan a alimentarse en la página superior; cuando alcanzan la madurez, se liberan del moco y se dejan caer al suelo donde se les interceden para realizar la metamorfosis.
A esto le sigue una segunda generación, en el período comprendido entre finales de julio y septiembre, y posiblemente, en ciertos entornos y en condiciones climáticas favorables, también una tercera generación que se superpone al final de la segunda.
Estas últimas generaciones originan las pre-pupas que se cierran dentro de una cama de choque, dentro del suelo, para pasar el invierno como prepupa.
La babosa del cerezo o del peral completa así dos o tres generaciones al año.
El daño es evidente en las hojas; Las larvas devoran el mesófilo foliar, dejando las venas intactas y, a veces, incluso una de las dos epidermis.

Papel ecológico –
La babosa del cerezo o del peral vive de plantas de pera, cereza, ciruela y otros árboles frutales. Las larvas, como se mencionó, viven en la página superior de la hoja, produciendo extensas erosiones de la misma, respetando las costillas y la página inferior; Las hojas más dañadas se vuelven amarillas y caen. En general, el daño causado es muy modesto, ya que aparecen en plantas aisladas.
La lucha contra este insecto casi nunca se lleva a cabo directamente porque las infestaciones rara vez alcanzan tales intensidades como para justificar la intervención. En el caso de infestaciones particulares y graves, se pueden usar los insecticidas larvicidas normales, cuidando sin embargo para evaluar la presencia de insectos útiles y, por lo tanto, también el período adecuado.

Guido Bissanti

Fuentes
– Wikipedia, la enciclopedia libre.
– Russo G., 1976. Entomología agraria. Parte especial. Liguori Editore, Nápoles.
– Tremblay E., 1997. Entomología aplicada. Liguori Editore, Nápoles.



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