Cómo hacer un huerto orgánico
Cómo hacer un huerto orgánico
En la primavera, más que en el Vernino, existe el deseo de cultivar verduras y verduras en su jardín de vegetales. Es una operación que puede generar mucho entusiasmo pero también desilusiones si no aclaramos algunos aspectos. El primer objetivo debe ser producir sin el uso de la química (donde debe evitarse la contribución sobre todo de los fertilizantes nítricos), de una manera totalmente natural de acuerdo con el principio de que la naturaleza es suficiente para sí misma. Esto nos permitirá respetar el medio ambiente y, sobre todo, respetarnos para que nos alimentemos de productos genuinos y saludables. El punto de partida debe ser obviamente la calidad de la tierra y la exposición al sol; los mejores productos se obtienen en suelos sueltos, ricos en materia orgánica, bien expuestos al sol y no sometidos a los vientos.
Se encontró el sitio adecuado para el primer trabajo, que debe hacerse a tiempo (posiblemente en el invierno) es una buena fertilización orgánica (el estiércol de ganado maduro es el mejor y más equilibrado) y un procesamiento de 30-40 cm que interactúa con el estiércol .
La herramienta adecuada para este procesamiento es la pala, de lo contrario, en ausencia, una buena azada. Posteriormente, en el período anterior a la siembra, el suelo debe volver a trabajarse con una azada, privado de hierbas (que, no obstante, pueden dejarse húmedas en el suelo) y refinado para acomodar las plántulas jóvenes. En esta fase podemos agregar un compost orgánico, humus de lombriz que le dará al suelo no solo los nutrientes sino también las mejores características físicas. La siembra se puede hacer directamente o después de la siembra en un vivero y posterior trasplante. En cualquier caso, la distancia de siembra debe ser tal que permita dos aspectos: una distancia adecuada entre las plantas que no se superponen y los espacios para poder pasar dentro del jardín para todas las operaciones de cultivo. Otro consejo fundamental es asociar las plantas que trabajan juntas en sinergia y rotaciones correctas para evitar que las plantas vuelvan en la misma parcela creando problemas de fatiga del suelo o fitosanitarios.
Para la selección y siembra de cultivos individuales, consulte la sección específica, mientras que para el riego, el consejo es utilizar el riego por lluvia utilizando mangueras (tubos huecos) que le permitirán ahorrar significativamente la cantidad de agua y evitar la ocurrencia de hongos y otras enfermedades de plantas. Además, este sistema le permite conectar su sistema de riego a un pequeño programador (que puede encontrar en Internet o en tiendas especializadas) a un costo de algunas decenas de euros. Para el riego, sin embargo, siempre tenga en cuenta llevarlo a cabo temprano en la mañana o al atardecer para evitar el estrés, el agua y la pérdida de calor y fitopatías.
Importante, en términos de prevención, es el control de insectos, ácaros y hongos. Normalmente, si ya ha adoptado un buen procesamiento y la fertilización orgánica del suelo, una buena rotación y desalineación la mayoría de los problemas se resuelven. Si están presentes pulgones, cochinillas y otros insectos, se pueden utilizar insecticidas y técnicas naturales descritos aquí, teniendo cuidado de seguir cuidadosamente las indicaciones de preparación y distribución.
Finalmente para la recolección: siempre opere con tijeras limpias y nunca rasgue la fruta o las hojas. Esta es una de las principales operaciones que predispone a la planta a sufrir ataques parasitarios especialmente de hongos.