Macetas de turba para sembrar
Macetas de turba para sembrar
Los tarros de turba son recipientes pequeños (de unos centímetros) que se utilizan para crear semilleros biodegradables.
Las macetas de turba están elaboradas con materiales 100% orgánicos y respetuosos con el medio ambiente, que facilitan la plantación de las plantas con la ventaja de no provocar estrés y traumatismos en las raíces ya que, tras la emergencia de las plántulas, se pueden colocar directamente en el molido o en maceta permanente para cultivo.
Las macetas de turba para la siembra son de hecho una solución ideal para germinar las semillas y llevar a cabo la siembra: gracias al material biodegradable, la maceta se puede enterrar con toda la planta, en el jardín o dentro de un contenedor más grande., Sin riesgos para el sistema raíz.
En este sentido, las tinajas de turba, además de ser sumamente cómodas y prácticas, protegen el medio ambiente y aseguran el óptimo desarrollo de plantas y hortalizas que no se ven afectadas por el trauma del trasplante.
Estos frascos están disponibles comercialmente, tanto en tiendas especializadas como en Internet, y pueden tener varios tamaños y formas.
Van desde los redondos, con un diámetro que va desde los 8 a los 12 cm, hasta los cuadrados en una amplia gama de tamaños.
Uso –
Las macetas de turba son rápidas y fáciles de usar. Estos deben rellenarse ¾ con un sustrato de siembra, el cual debe estar ligeramente compactado y humedecido, luego de lo cual se colocan una o más semillas en el centro de este (dependiendo del grado de germinación de la planta) y se cubren con la parte restante de siembra. tierra, dejando unos mm hasta el borde de la maceta.
En este punto, el suelo se compacta ligeramente y se riega el suelo, asegurándose de que haya suficiente drenaje en el fondo de la bandeja o de la zona donde coloque estos frascos y no se produzca estancamiento.
El frasco debe regarse varias veces al día y mantenerse en un área sombreada hasta la aparición de la planta joven.
En este punto hay que esperar a que brote la semilla, exponiendo gradualmente el frasco a pleno sol.
La ventaja de la maceta de turba es que a la hora del trasplante, será necesario plantar todo, incluida la maceta que debe estar completamente cubierta por la tierra del jardín o recipiente en el que se insertará, y agua.
De esta forma, la planta joven no sufrirá una parada de crecimiento postrasplante con el consiguiente retraso en la entrada en producción.