Salvemos las células del planeta – los hábitats
Salvemos las células del planeta – los hábitats
Los hábitats (término que en latín significa «vive») son los lugares que, por sus características particulares, permiten la vida de los seres vivos.
Los complejos equilibrios del ciclo del agua.
Los grandes glaciares y zonas frías del planeta.
Los desiertos, con su entorno extremo
Los grandes bosques tropicales …
Pensamos en los hábitats como células y en todo el planeta Tierra como un cuerpo.
Un cuerpo formado por diferentes células, con diferentes funciones, roles, pero todas interconectadas entre sí.
Un cuerpo donde grupos de Hábitats se unen para constituir órganos fundamentales para el equilibrio y las funciones de nuestro mundo.
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Al igual que las células, no hay dos hábitats idénticos y células similares, cada hábitat está poblado por innumerables cuerpos vivos: desde los más microscópicos hasta los más conspicuos.
El estado de bienestar o salud de cada hábitat está vinculado a la riqueza de sus entornos, su diversidad y biodiversidad.
Hoy los Hábitats están sufriendo; las células del planeta están enfermas, se están empobreciendo.
Pérdida de biodiversidad, explotación indiscriminada, fragmentación de Hábitats: planeta cada vez más pobre y humanidad cada vez más sufriendo.
¿Existe una cura para curar estas células y con ellas nuestro único hogar? ¿Qué nos pide la Madre Tierra?
Solo hay un camino por recorrer en sincronía con las leyes de la naturaleza.
«La naturaleza nos desafía a ser solidarios y atentos al cuidado de la creación, también a prevenir, en la medida de lo posible, las consecuencias más graves». (Papa francesco).
Guido Bissanti