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Gypsonoma aceriana

Gypsonoma aceriana

La Gypsonoma aceriana (Gypsonoma aceriana (Dup.)) Es una polilla que pertenece a la familia Tortricidae.

Sistemática –
Desde un punto de vista sistemático, pertenece al dominio Eukaryota, Reino Animalia, subgénero Eumetazoa, Superphylum Protostomia, Phylum Arthropoda, Subphylum Tracheata, Superclass Hexapoda, Class Insecta, Eventualidad de la información. Heteroneura, División Ditrysia, Superfamiglia Tortricidea, Familia Tortricidae y por lo tanto al género Gypsonoma y a la especie G. aceriana.

Distribución geográfica y hábitat –
La Gypsonoma aceriana es un insecto cuyas larvas se alimentan de Populus nigra, Populus nigra subsp. italica, Populus alba, Populus balsamifera, Acer platanoides y Acer campestre. Es una especie común en plantaciones y viveros de álamos. Se encuentra desde Europa hasta Rusia, este de Turquía e Irak. También está presente en el norte de África. Esta especie se ha encontrado en Italia, Francia, Alemania y los Países Bajos y en otros países asiáticos como en Japón.

Morfología –
La Gypsonoma aceriana es una mariposa mediana pequeña, con una envergadura de 10-12 mm; las alas delanteras blanquecinas; La librea muestra una banda parda, en correspondencia con la unión al pecho y con la parte distal del ala de mármol. Las larvas miden aproximadamente 10 mm de longitud y son de color nuez.

Actitud y ciclo biológico –
La Gypsonoma aceriana pasa el invierno en la etapa larvaria dentro de las yemas apicales que dañan el cegamiento, o en un nicho excavado debajo del punto de inserción de las hojas.
En la siguiente primavera las larvas reanudan su actividad alcanzando la madurez hacia el final de las mismas. El parpadeo de los adultos ocurre entre fines de mayo y junio, dando lugar a la primera generación de larvas del año, activa en el verano. A finales de julio, los adultos del segundo vuelo parpadean, dando lugar a las larvas que invernan. El número de generaciones es así de dos.

Papel ecológico –
El daño del Gypsonoma aceriana se manifiesta en los brotes y está determinado por la acción trófica de las larvas que inicialmente atacan las hojas que erosionan la página de la hoja; en un segundo momento comienzan a cavar túneles en la parte central de los brotes jóvenes, causando que se sequen. Debido a este ataque, las plantas reaccionan con un recrecimiento temprano de las yemas laterales, lo que hace que el árbol adopte una forma agrupada que hace que los árboles jóvenes de los viveros no se puedan comercializar.
La contención del Gypsonoma aceriana puede ser química y sigue los criterios de la lucha guiada e integrada.
Sin embargo, debe recordarse que el daño más significativo se produce en las plántulas jóvenes de viveros en los que se planifican tratamientos preventivos a mediados del verano, en presencia de larvas de la 1ra generación.
Sin embargo, antes de operar cualquier intervención, se deben colocar trampas sexuales para monitorear a la población. Esta técnica se utiliza para identificar los momentos de vuelo máximo, para llevar a cabo los tratamientos en el momento adecuado, de una manera correcta y racional y salvaguardando la entomofauna útil tanto como sea posible.
Para la colocación de trampas sexuales en viveros es necesario esperar hasta mediados de mayo.
Los tratamientos se repiten cada 10-15 días, uno de otro.
Los productos que se utilizarán para los tratamientos de verano son los larvicidas endoterápicos.

Guido Bissanti

Fuentes
– Wikipedia, la enciclopedia libre.
– Russo G., 1976. Entomología agraria. Parte especial. Liguori Editore, Nápoles.
– Tremblay E., 1997. Entomología aplicada. Liguori Editore, Nápoles.



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