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Cómo cultivar el apio nabo de una manera biológica

Cómo cultivar el apio nabo de una manera biológica

Para cultivar el apio nabo (Apium graveolens var. Rapaceum) de manera orgánica, es necesario partir de las condiciones climáticas más adecuadas para este vegetal. Aunque muy cultivado, debido al consumo de su raíz, en Europa central, el apio nabo se cultivó mucho en Italia.
Aunque el apio nabo es una planta de dos años (desarrolla flores y semillas en el segundo año de vida) se cultiva en jardines con un ciclo anual y se puede cultivar en toda la península, siempre que se regule constantemente, especialmente en verano.
La plántula de apio nabo puede comenzar a partir de finales de febrero y puede durar hasta fines de abril, con cosecha en el otoño. Si se encuentra en las zonas más cálidas de la península, también puede sembrar en agosto-septiembre y cosechar al comienzo de la primavera siguiente.

Para anticipar la siembra o para obtener una planta de precisión, se puede usar un semillero o esperar en el campo abierto para que la temperatura haya excedido al menos 10ºC. Es necesario esperar al menos 6 semanas para el trasplante desde el semillero. Sin embargo, se debe plantar (o trasplantar) teniendo cuidado de dejar entre cada planta 25 cm.
Veamos ahora concretamente cómo cultivar el apio nabo de una manera biológica. Los suelos más aptos para el apio nabo (dada la necesidad de desarrollar bien su raíz) son aquellos de masa media y profunda y fertilizados de antemano con cantidades medias de abono maduro o, como alternativa, abono doméstico. La integración de sales minerales se puede realizar en suelos con pH subacífico con cenizas de madera.
Importante para el crecimiento equilibrado de esta verdura es el uso del riego y la técnica de cobertura vegetal que permite un buen equilibrio de la humedad, evita la posibilidad de estancamiento (que requiere menos riego) y la aparición de la podredumbre muy perjudicial para esta planta el riego se puede hacer con mangueras y goteos. Algunos agricultores no adoptan el mantillo pero continúan desherbando. Recomendamos (si tiene disponibilidad, especialmente paja) mantillo.
Para el control de las enfermedades de las plantas de apio, si ha optado por mulching no debería tener ningún problema con la septoriosis, que se manifiesta con manchas oscuras y bordes amarillos en las hojas hasta que la planta se descompone y muere. Otra técnica para evitar esta enfermedad es una buena rotación evitando el uso de apionabos en la misma parcela durante al menos dos años.
Entre los insectos, la única causa de preocupación es la mosca del apio, la Philophylla heraclei. Este insecto se mantiene bien bajo control con el uso de aceite de neem.
Entre las variedades más cultivadas de apio nabo mencionamos: Sedano rapa di Verona, Cisko y Monarque (que son variedades holandesas) y Rowena.
Debido a la peculiaridad de mantenerse bien después de la cosecha (hasta 4 meses), el apio nabo puede convertirse en un vegetal interesante para una dieta equilibrada de temporada.




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