Valor nutricional del maní
Valor nutricional del maní
El maní (Arachis hypogaea L., 1753) es una planta herbácea de la familia Fabaceae originaria de América del Sur, ampliamente cultivada por sus semillas comestibles.
Las semillas se llaman maní, maní, maní, etc.
Características –
El maní es una planta que se cultiva a nivel mundial por sus semillas, comúnmente conocidas como maní o maní. Es uno de los cultivos más importantes y ampliamente utilizados en la producción de aceite vegetal y productos alimenticios.
El maní es una planta herbácea que crece a ras de suelo. Su tallo principal es ligeramente ramificado y puede alcanzar una altura de unos 30-50 cm.
Esta planta tiene un sistema de raíces bien desarrollado con raíces laterales que se extienden hacia el suelo. Esto ayuda a la planta a absorber los nutrientes que necesita para crecer.
Las hojas del maní son opuestas y compuestas, con 4 folíolos ovalados o lanceolados en cada pecíolo. Las hojas son de color verde brillante y varían en tamaño.
Las flores de maní son amarillas y crecen en tallos cortos cerca de la base de la planta. Son flores de tipo hermafrodita, lo que significa que contienen órganos tanto masculinos como femeninos, lo que facilita la polinización.
El maní es una planta autógama, lo que significa que el polen de sus flores puede autofertilizarse o fertilizar las mismas flores en la misma planta.
Después de la polinización, la flor se convierte en una estructura llamada concha o vaina, que crece hacia el suelo. En el interior de la vaina se forman cacahuetes, que en realidad son semillas, contenidas en cáscaras arrugadas de color marrón.
Los cacahuetes se pueden propagar a través de semillas, plantando las semillas en un suelo adecuado, o mediante la técnica de siembra directa, colocando las semillas directamente en el suelo.
Los cacahuetes crecen bien en climas cálidos y requieren un suelo arenoso y bien drenado. La planta generalmente se cultiva anualmente.
Los cacahuetes están listos para cosechar aproximadamente entre 100 y 150 días después de la siembra, según la variedad y las condiciones climáticas. Durante la cosecha, se levanta la planta y se entierran las vainas para extraer los cacahuetes.
Carta nutricional –
La hoja de información nutricional del maní puede variar ligeramente según la variedad y el método de preparación, pero la siguiente es una estimación aproximada de la información nutricional por cada 100 gramos de maní tostado sin sal:
– Calorías: 567 kcal
– Grasa: 49,24 g
– Ácidos grasos saturados: 6,28 g
– Ácidos grasos monoinsaturados: 24,43 g
– Ácidos grasos poliinsaturados: 15,56 g
– Hidratos de carbono: 16,13 g
– de los cuales azúcares: 4,72 g
– Proteína: 25,8 g
– Fibras: 8,5 g
– Sodio: 18 mg
– Potasio: 705 mg
– Calcio: 92 mg
– Hierro: 4,58 mg
– Magnesio: 168 mg
– Vitamina E: 8,33 mg
– Vitamina B6: 0,35 mg
Además, los cacahuetes son una fuente de proteínas de origen vegetal, grasas saludables (como los ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados), fibra y vitaminas esenciales, como la vitamina E y la vitamina B6. Sin embargo, es importante consumirlos con moderación ya que también son altos en calorías. Si tienes alergia al maní, es fundamental evitar su consumo y tener cuidado con los alimentos con posible contaminación.
Propiedad –
Los cacahuetes son una fuente de proteínas y grasas saludables que pueden formar parte de una dieta equilibrada cuando se consumen con moderación. A continuación se detallan algunas de las propiedades del maní:
Proteína: Los cacahuetes son una buena fuente de proteína vegetal. Contienen todos los aminoácidos esenciales necesarios para la síntesis de proteínas en el cuerpo humano, lo que los convierte en una gran opción proteica para vegetarianos y veganos.
Grasa: la mayor parte de la grasa que se encuentra en los cacahuetes se compone de grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, como el ácido oleico y el ácido linoleico. Estas grasas se consideran saludables para el corazón y pueden ayudar a reducir el colesterol LDL («colesterol malo»).
Vitaminas y minerales: los cacahuetes son una buena fuente de varias vitaminas y minerales esenciales, como la vitamina E, la vitamina B3 (niacina), el ácido fólico, el magnesio, el zinc y el potasio.
Fibra: Los cacahuetes contienen fibra dietética, que puede promover la salud digestiva y contribuir a la sensación de saciedad, lo que ayuda a controlar el apetito.
Antioxidantes: los cacahuetes también contienen antioxidantes, como el resveratrol, el ácido p-cumárico y el ácido fítico, que pueden ayudar a combatir el estrés oxidativo y reducir el riesgo de enfermedades crónicas.
Beneficios para el corazón: debido a sus grasas y nutrientes saludables, los cacahuetes pueden ayudar a mejorar la salud del corazón. Consumirlos con moderación puede ser útil en la prevención de enfermedades cardiovasculares.
Regulación de la glucosa en sangre: algunos estudios sugieren que los cacahuetes pueden ayudar a estabilizar los niveles de azúcar en sangre, lo que puede ser especialmente beneficioso para las personas con diabetes tipo 2.
A pesar de los muchos beneficios, es importante tener en cuenta que los cacahuetes también son relativamente altos en calorías y pueden causar alergias alimentarias en algunas personas. Por ello, si tienes antecedentes de alergias al cacahuete u otros frutos secos, es fundamental evitar su consumo y consultar con un médico si es necesario. Además, los cacahuetes a menudo se pueden tratar con sal u otros condimentos añadidos, por lo que es aconsejable elegir variedades sin sal añadida o aceites no saludables. Como con cualquier alimento, es fundamental consumirlos con moderación como parte de una dieta equilibrada.