Stigmella malella
Stigmella malella
El pigmeo de manzana con bandas (Stigmella malella Stainton, 1854) es una polilla perteneciente a la familia Nepticulidae.
Sistemática –
Desde un punto de vista sistemático pertenece a:
Dominio eucariota,
Reino Animal,
Sub-reino Eumetazoa,
Protostomía de superphylum,
Phylum Arthropoda,
Subphylum Tracheata,
Superclase Hexapoda,
Clase de insecta,
Subclase Pterygota,
Cohorte de endopterygota,
Superorden oligoneópteros,
Sección Panorpoidea,
Orden Lepidoptera,
Suborden Glossata,
Infraorden Heteroneura,
División Nepticulina,
Familia Nepticulidae,
Género Stigmella,
Especies de S. malella.
Los términos son sinónimos:
– Nepticula malella Stainton, 1854;
– Nepticula angustella Heinemann & Wocke, 1877;
– Nepticula nigrobrunella Groschke, 1939.
Distribución geográfica y hábitat –
El pigmeo de manzana con bandas es una pequeña polilla que se encuentra en casi toda Europa, con la excepción de Islandia y Noruega.
Las larvas de este insecto viven en varias especies del género Malus y, a veces, Prunus.
Morfología –
La Stigmella malella es una pequeña polilla cuyos adultos tienen una envergadura de unos 5-6 mm.
Las alas delanteras son de color gris pardusco con una banda transversal blanquecino-plateada y bordes finamente deshilachados.
La larva es amarilla, de cabeza marrón y con partes bucales masticadoras con mandíbulas opuestas, seis patas torácicas y piernas abdominales.
La pupa tiene apéndices de cabeza visibles, alas y patas que se encuentran en vainas.
Los huevos se ponen en la capa inferior de la hoja.
Actitud y ciclo de vida –
El pigmeo de manzana con bandas pasa el invierno, en el suelo, en la etapa de pupa.
Los adultos aparecen en el período primaveral, entre finales de marzo y principios de abril, dando lugar a unas 4 generaciones cuyos vuelos se realizan en los respectivos meses de verano; y precisamente:
– 1er vuelo: adultos en los meses de marzo a abril, a partir de pupas invernales;
– 2º vuelo: adultos en los meses de mayo a junio;
– 3er vuelo: adultos en julio;
– 4º vuelo: adultos en los meses de agosto a septiembre; esta generación produce las pupas invernales.
Al final de su crecimiento, la larva abandona la hoja y pasa a la etapa de niposis en el suelo donde pasa el invierno.
El daño de esta polilla está determinado por la etapa larvaria; las larvas, con su actividad trófica, se alimentan del mesófilo pero respetan la epidermis, generando minas de hojas alargadas con un curso sinuoso y serpenteante, denominadas «ofionomas».
Las minas son transparentes y evidentes como áreas blanquecinas ocre en la página de la hoja verde. Una observación más cercana de las minas revela una línea media más oscura que atraviesa la mina y que se debe a los excrementos de las larvas.
Normalmente las minas no son tan numerosas como para provocar la caída de las hojas.
Papel ecológico –
La lucha contra Stigmella malella casi nunca es necesaria tanto por su baja nocividad como porque los tratamientos realizados para el Cemiostoma (Leucoptera malifoliella O. Costa, 1836) tienen una acción de control también sobre esta polilla.
Además, hay que tener en cuenta que cualquier intervención química degrada las biocenosis de la entomofauna útil, incluido el himenóptero eulófido, parasitoide de las larvas que son atacadas en el interior de las minas.
Por ello, se debe realizar un seguimiento ambiental mediante muestreo o con trampas sexuales que controlen el momento del parpadeo.
En el caso del muestreo, se elige un cierto número de hojas, tomadas del huerto a mediana altura, y en ellas se cuentan los huevos, larvas y minas presentes; los umbrales de intervención son:
– 1ª generación: 20-30% de hojas con huevos, o 20 minas de cada 100 hojas con larvas vivas;
– 2ª generación: 15-20% de hojas con huevos, o 20 minas con larvas vivas en 100 hojas;
– 3ª generación: 10 minas con larvas vivas en 100 hojas. Intervenimos con reguladores de crecimiento o desarrollo inhibidores de quitina aplicables incluso al inicio de vuelos.
En el caso del seguimiento con trampas sexuales, la metodología de intervención es la siguiente:
– Las trampas deben instalarse en el huerto a finales de marzo en un número de 1-2 por hectárea o por parcela, según el tipo de explotación.
La evaluación de los umbrales de intervención es compleja y está vinculada a diversos factores como la densidad de siembra de cultivos, especializaciones, etc; en algunos casos, los umbrales de 400 adultos de primera generación atrapados por semana justifican la intervención contra la segunda generación.
Guido Bissanti
Fuentes
– Wikipedia, la enciclopedia libre.
– Russo G., 1976. Entomología agrícola. Pieza especial. Liguori Editore, Nápoles.
– Tremblay E., 1997. Entomología aplicada. Liguori Editore, Nápoles.