Tubérculo
Tubérculo
En botánica, el tubérculo es un órgano de una planta agrandada debido a la abundancia de parénquima de reserva. La formación de los tubérculos puede ocurrir en las tres partes fundamentales del cuerpo de las fanerógamas herbáceas (raíces, tallo o caule y hojas); por lo tanto, se pueden obtener tubérculos de raíz, foliáceos o foliares, respectivamente. También puede tener tubérculos mezclados cuando la región que tuberifica es la del collar (ejemplo típico es el de remolacha). Los casos de tubérculos caulinares son las de patata y alcachofa de Jerusalén, mientras que los tubérculos foliares son generados por las escalas más o menos carnosa de los bulbos; los tubérculos de raíz son, por ejemplo del acónito y asphodel. El tubérculo puede pues ser bajo tierra, si se forma en la parte subterránea de la planta o bajo tierra si se forma en la parte aérea (por ejemplo, Las axilas de las hojas de varias plantas).
por lo tanto, un tubérculo es una porción planta modificada que asume un aspecto globular más o menos alargada con la función del órgano en el que son sustancias de reserva acumulados, tanto para superar los momentos ambientales de plantas de dificultad (por ejemplo, para asegurar la supervivencia de la planta durante invierno) y para las etapas posteriores de reproducción; de hecho la presencia, en su superficie, de los brotes auxiliares (llamado «ojos») que pueden convertirse en un nuevo individuo, hace que estos cuerpos de asumir un papel importante en la propagación vegetativa (o propagación clonal) de la planta que los produce.
En cuanto a la naturaleza de las sustancias de reserva, el almidón es el más frecuente; por esta razón, el tubérculo de muchas plantas tiene fines alimenticios (como en la papa); otras sustancias presentes en el tubérculo son los hidratos de carbono, como la inulina (en la alcachofa de Jerusalén) o incluso los azúcares solubles (como en la remolacha); también podemos encontrar mucílagos (como en Orchidaceae) y, a veces, aceites grasos (como en Cyperus esculentus). Debido a las propiedades altamente nutritivas de las sustancias que contienen, los tubérculos han asumido, desde los albores de la historia y la agricultura, un papel muy importante en la dieta de humanos y animales.
Finalmente, se debe hacer una distinción entre los tubérculos y las «raíces tuberosas», también conocidos como rizotubérculos; oragni de plantas típicas del género Dahlia, batata (Ipomoea batatas) o mandioca (yuca), que son en cuerpos de datos similares a las raíces laterales ampliadas; estos últimos, a diferencia de los tubérculos, si están separados del tallo, no pueden dar vida a una nueva planta ya que no tienen la posibilidad de emitir ventosas (capacidad pollonifica). Órganos similares son los de la trufa, pero que pertenecen al reino de las setas.