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Atropa belladonna

Atropa belladonna

La belladona (Atropa belladonna L.) es una planta con flores perteneciente a la familia Solanaceae.

Sistemática –
La belladona, desde el punto de vista sistemático, pertenece al dominio eucariota, Reino Plantae División Magnoliophyta, clase Magnoliopsida, Solanales orden, familia de las solanáceas, y luego al género Atropa y la especie A. belladona.

Etimología –
El término Atropa deriva del griego Ἄτροπος Átropos (de ninguna manera, lo inmutable, lo inevitable); Atropo era, de hecho, el nombre de uno de los tres Moire que, en la mitología griega, corta el hilo de la vida de los mortales (porque es una planta muy venenosa); el epíteto bella-donna se refiere al uso cosmético de la planta que fue utilizada por las cortesanas de Venecia como gotas para los ojos, para provocar la dilatación de la pupila.

Distribución Geográfica y Hábitat –
La belladona crece esporádicamente en zonas montañosas y submontañosas hasta una altitud de 1.400 metros, especialmente en suelos calcáreos y en el borde de las maderas oscuras, como el haya. Lo encontramos en la naturaleza en Europa Central, en el norte de África y en el oeste de Asia hasta Pakistán.

Descripción –
La Atropa belladona es una especie herbácea perenne, con un gran rizoma y un tallo robusto. Puede alcanzar una altura entre 70 y 150 cm. Tiene hojas simples, pecioladas y ovales-lanceoladas que se alternan con hojas más pequeñas en el área superior; Tanto las hojas como el tallo están cubiertos de pelos glandulares que son responsables del desagradable olor de la planta. Belladona florece en el verano y la polinización es entomogama; de éstos se desarrollan pequeñas bayas negras brillantes rodeadas por la copa que, cuando está madura, se abre como una estrella. Recuerde que las bayas son venenosas para los humanos hasta que puedan causar la muerte.

Cultivo –
La Atropa belladona rara vez se cultiva a nivel amateur, tanto por su toxicidad como por su bajo valor estético. En cambio, se cultiva intensivamente para sus extractos de la industria farmacéutica, fitoterápica y homeopática. Para la técnica de cultivo consultar la siguiente hoja.

Costumbres y tradiciones –
La atropa belladona ha sido utilizada desde tiempos inmemoriales por los médicos en fitoterapia por sus cualidades espasmolíticas. El principio activo de la planta es la atropina o DL-giusciamina. La atropina todavía se usa hoy en día como dilatador de las pupilas y como relajante muscular. En homeopatía, las píldoras hechas de belladona se usan para faringitis, nasofaringitis, traqueobronquitis y amigdalitis, fiebre gripal, fiebre alta infantil, convulsiones, dolor de cabeza vasomotor violento y pulsátil, procesos inflamatorios locales con enrojecimiento, hinchazón, calor intenso y radiante, dolor agudo , violento y palpitaciones, ataques de delirio, hipersensibilidad al ruido ya la luz brillante.
Os recordamos que, en cuanto a las propiedades de la belladona, hay que hacer una distinción en función del tipo de alcaloide que se utilice y, sobre todo, dado que la planta es muy tóxica, es imprescindible la prescripción médica (ingesta accidental de las bayas puede causar la muerte).
La belladona es, de hecho, una planta muy tóxica y, por ello, no debe utilizarse ninguna forma extractiva tradicional, salvo como especialidad medicinal, en forma de extracto titulado y estandarizado.
A pesar de ello, la belladona juega un papel de cierta importancia en el campo médico ya que de esta planta se extraen principios activos (alcaloides tropánicos), que forman parte de la composición de auténticos fármacos utilizados en el tratamiento de diferentes tipos de dolencias.
Los alcaloides tropánicos contenidos en la belladona, de hecho, ejercen una acción antimuscarínica (o anticolinérgica, si se prefiere) y, según el órgano o tejido sobre el que actúan, provocan efectos diferentes.
La atropina está disponible en preparaciones farmacéuticas inyectables con indicaciones para el tratamiento de la bradicardia sinusal (especialmente si se complica con hipotensión) y como medicación preanestésica para disminuir la salivación y las secreciones excesivas de las vías respiratorias.
De hecho, la atropina, gracias a su actividad anticolinérgica, es capaz de reducir la liberación de acetilcolina a nivel del nódulo sinusal, induciendo así un aumento de la frecuencia cardíaca; además, ejerce una acción broncodilatadora y una reducción de la secreción traqueobronquial.
La atropina también forma parte de la composición de los colirios que se utilizan en los exámenes oculares, ya que -gracias al bloqueo que ejerce sobre los receptores muscarínicos presentes en el ojo- es capaz de inducir midriasis y bloquear el músculo ciliar impidiendo así el foco (ciclopléjico). acción).
La escopolamina (o l-hioscina o hioscina), por otro lado, se puede encontrar en medicamentos especializados para uso inyectable o en forma de parches transdérmicos para el tratamiento de las náuseas y los vómitos. Además, es el principio activo de diversos fármacos utilizados contra los espasmos del tracto gastrointestinal y del tracto genitourinario, gracias a la acción relajante sobre los músculos lisos de estos sistemas ejercida, precisamente, a través del bloqueo de los receptores muscarínicos.
En la medicina popular tradicional, las hojas de belladona se han utilizado durante mucho tiempo en cataplasmas para aplicar directamente sobre la zona afectada en caso de trastornos neurovegetativos, hipercinesia, hiperhidrosis y asma bronquial. Además, la belladona también se usa en la medicina popular para el tratamiento de dolores gastrointestinales, dolores musculares y bronquitis.
También hay usos de esta planta en la medicina homeopática. Se puede encontrar en forma de gránulos, tabletas, gotas y óvulos. En este contexto, la planta se utiliza para el tratamiento de una gran variedad de dolencias, como fiebre, inflamación e infecciones agudas de las vías respiratorias, dolores de cabeza, meningitis aguda, convulsiones, espasmos, conjuntivitis alérgica, orzuelos, ojos secos, fotofobia, inflamaciones de la piel, acné, eritema, inflamación del tracto gastrointestinal y urogenital e inflamación de las articulaciones.
La dosis de remedio homeopático a tomar puede variar de un individuo a otro, dependiendo también del tipo de trastorno a tratar y del tipo de preparación y dilución homeopática a utilizar.
También recordamos los efectos secundarios del uso de partes de esta planta.
En caso de ingestión de grandes cantidades de belladona o sus preparados, se puede producir intoxicación por atropina, dando lugar a síntomas graves, tales como: taquicardia, sequedad de boca, midriasis, inquietud, alucinaciones, delirios, depresión respiratoria, coma colapso y, en los casos más graves casos, incluso puede ocurrir la muerte.
La dosis letal depende del contenido de atropina.
Por tanto, debido a la toxicidad de la planta, se desaconseja encarecidamente su uso en preparados tradicionales, pero sólo en forma de especialidades medicinales y únicamente bajo prescripción médica.

Método de preparación –
Los preparados a base de belladona quedan obviamente relegados al campo químico-farmacéutico y bajo la muy estricta supervisión e indicación de un médico.

Guido Bissanti

Fuentes
– Wikipedia, la enciclopedia libre.
– Treben M., 2000. Salud de la Farmacia del Señor, Consejos y experiencia con hierbas medicinales, Ennsthaler Publisher
– Pignatti S., 1982. Flora de Italia, Edagricole, Bolonia.
– Conti F., Abbate G., Alessandrini A., Blasi C. (editado por), 2005. Una lista de verificación anotada de la flora vascular italiana, Palombi Editore.

Advertencia: las aplicaciones farmacéuticas y los usos alimúrgicos están indicados solo con fines informativos y de ninguna manera representan una prescripción médica; por lo tanto, no existe responsabilidad por su uso con fines curativos, estéticos o alimenticios.




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