Cacoecimorpha pronubana
Cacoecimorpha pronubana
El minador del clavel o piral de los claveles, tortrix del clavel, gusano del clavel (Cacoecimorpha pronubana Hübner, 1799) es un insecto perteneciente a la familia Tortricidae.
Sistemática –
Desde un punto de vista sistemático pertenece a:
Dominio eucariota,
Reino Animal,
Subreino Eumetazoa,
Superphylum protostomía,
Filo artrópodos,
Subfilo tracheata,
Superclase Hexapoda,
Clase insecto,
Subclase Pterygota,
Cohorte de endopterigota,
Superorden Oligoneoptera,
Sección panorpoide,
Orden Lepidópteros,
Suborden Glossata,
Infraorden heteroneura,
División de ditrisia,
Superfamilia Tortricoidea,
Familia Tortricidae,
Subfamilia Tortricinae,
Tribu Archipini,
Género Cacoecimorpha,
Especie C. pronubana.
El término es básionimo:
– Tortrix pronubana Hübner, 1799.
Los términos son sinónimos:
– Cacoecia ambustana Frölich, 1830;
– Cacoecia hermineana Duponchel, 1834;
– Cacoecia insolatana Lucas, 1848;
– Cacoecimorpha ambustana (Frölich, 1830);
– Cacoecimorpha hermineana (Duponchel, 1835);
– Cacoecimorpha perochreana (Herrich-Schäffer, 1856);
– Tortrix hermineana Duponchel, 1834;
– Tortrix perochreana Herrich-Schäffer, 1856;
– Tortrix pronubana Hübner, 1799.
Dentro de esta especie se reconocen las siguientes subespecies:
– Cacoecimorpha pronubana subsp. obsoletana (Strand, 1901);
– Cacoecimorpha pronubana subsp. pronubana.
Distribución Geográfica y Hábitat –
La Cacoecimorpha pronubana es una polilla originaria del Paleártico occidental. La especie está muy extendida en Europa. En el sur, la presencia se extiende a las zonas tropicales de África y, en el este, hasta Oriente Medio. En Inglaterra los primeros registros datan de 1905. La especie fue introducida en el Neártico (América del Norte). Hay partidos en los estados estadounidenses de Washington, Illinois y Florida.
Este insecto puede atacar, en particular, plantas de Arbutus unedo, Asphodelus, Dianthus, Euphorbia amygdaloides, Fragaria, Fuchsia, Hedera helix, Hippophae rhamnoides, Laurus nobilis, Ligustrum, Pelargonium, Robinia, Rosa, Rosmarinus, Thuja occidentalis, Viburnum tinus, Vitis vinifera y otras plantas.
Morfología –
La Cacoecimorpha pronubana es una mariposa de tamaño mediano, con una envergadura de 14-20 mm.
El macho tiene alas anteriores de color ocre con una banda transversal y márgenes de color marrón grisáceo. La hembra es más pálida con una librea más uniforme.
Las larvas son de color amarillo verdoso o verde oscuro, según la edad, y alcanzan una longitud de 22-24 mm.
La crisálida, que mide 8-12 mm, es inicialmente marrón, luego se vuelve más oscura, casi negruzca. En algunos individuos, sin embargo, permanece la coloración más clara.
Actitud y ciclo biológico –
La Cacoecimorpha pronubana es una polilla que pasa el invierno en estado de larva madura o crisálida sobre las plantas afectadas. Los adultos suelen parpadear en abril.
Después del apareamiento, oviponen en placas sobre las hojas, originando un número de generaciones a menudo superpuestas entre sí y en un número variable dependiendo de las condiciones ambientales en las que se cultiva el clavel.
En Europa central, normalmente produce dos generaciones al año; más generaciones son posibles, como se mencionó, en las regiones del sur y en invernaderos.
Su ciclo biológico está determinado por su polifagia.
Las orugas se pueden encontrar en su principal planta huésped, el clavel de campo (Dianthus caryophyllus), así como en muchas otras plantas, especialmente plantas ornamentales como rosas o crisantemos.
El primer estadio larvario es el de minador de hojas. Los siguientes estadios larvales se alimentan de la superficie de las hojas, provocando grandes erosiones foliares y una disminución de la superficie fotosintética.
Las orugas más maduras se alimentan tanto de hojas jóvenes como de brotes. Esto a menudo conduce a la deformación de las flores.
Rol Ecológico –
Cacoecimorpha pronubana es un insecto visible casi todo el año, con la larva polífaga que, bajo ciertas condiciones, puede causar serios problemas a los cultivos.
El insecto primero cava pequeñas minas en las hojas; posteriormente aparecen verdaderas erosiones en los brotes y hojas. Los brotes afectados se curvan característicamente; finalmente, aparecen erosiones externas de los botones florales que, más raramente, se vacían.
En los invernaderos, las larvas pueden causar daños considerables si se encuentran en grandes cantidades.
El daño es, por tanto, causado por los estados larvales.
La lucha contra estos dos insectos ha seguido hasta ahora el criterio de lucha guiada e integrada.
Para esta especie se han sintetizado feromonas sexuales, por lo que es posible seguir la tendencia de los vuelos y el tamaño de las poblaciones mediante la instalación de trampas sexuales de seguimiento. Con el seguimiento es posible identificar los períodos de máximo vuelo y por tanto de máxima oviposición para poder intervenir más rápidamente sobre las larvas.
Además, algunos reguladores del crecimiento y desarrollo inhibidores de la quitina también han demostrado una buena actividad, especialmente si se utilizan en las etapas iniciales del desarrollo embrionario (huevo) y en las primeras etapas larvarias. En cultivos protegidos se está ensayando la técnica de la confusión sexual (desorientación) mediante la aplicación de dosificadores filiformes o difusores de evaporación, a partir de los cuales se evapora la feromona en alta concentración.
En los últimos tiempos se han experimentado intervenciones con Bacillus thuringiensis ssp. kurstaki, combinado con algunos estresores, como coadyuvantes de la acción de la propia bacteria.
Por este Tortricida, dada su peligrosidad, se han dictado decretos de intervención obligatoria o cuarentena a nivel de varios países. En Italia la materia está regulada por el D.M. 30/11/52 y 27/8/73, en que se prevé la lucha obligatoria.
Guido Bissanti
Fuentes
– Wikipedia, la enciclopedia libre.
– GBIF, la Facilidad Global de Información sobre Biodiversidad.
– Russo G., 1976. Entomología agrícola. Parte Especial. Editorial Liguori, Nápoles.
– Pollini A., 2002. Manual de entomología aplicada. Edagricole, Bolonia.
– Tremblay E., 1997. Entomología aplicada. Editorial Liguori, Nápoles.
Fuente de la foto:
– https://inaturalist-open-data.s3.amazonaws.com/photos/283673703/original.jpeg