Fitorremediación de suelos contaminados por metales pesados
Fitorremediación de suelos contaminados por metales pesados: la naturaleza como aliada en la remediación ambiental
Los suelos contaminados con metales pesados representan una de las emergencias ambientales más graves en Europa.
Sin embargo, la naturaleza nos ofrece soluciones biológicas eficaces y sostenibles: sustancias naturales, plantas, hongos y diversos microorganismos pueden utilizarse para limpiar suelos contaminados.
Este enfoque se conoce como fitorremediación.
La fitorremediación aprovecha la capacidad de ciertas plantas (metalófitas e hiperacumuladoras) y los microorganismos asociados a sus raíces para absorber, biotransformar o inmovilizar metales pesados y contaminantes.
Esta estrategia de bajo coste y bajo impacto ambiental es especialmente adecuada para grandes áreas degradadas.
Estrategias principales –
• Fitorremediación: degradación enzimática de compuestos orgánicos por plantas (p. ej., Populus sp., Myriophyllium spicatum). • Fitoestabilización: fijación de metales en el suelo mediante enzimas y/o exudados radiculares (p. ej., Haumaniastrum, Alyssum, Gladiolus).
• Fitoextracción: absorción y acumulación en tejidos aéreos (p. ej., Pteris vittata para As, Thlaspi caerulescens para Zn/Cd, Alyssum bertolonii para Ni).
• Fitovolatilización: absorción y liberación gaseosa de contaminantes como Hg, Se y As (Stanleya pinnata, Arabidopsis thaliana transgénica).
• Rizofiltración: eliminación de metales pesados a través de las raíces (Phragmites australis, Brassica juncea, Salix sp.).
• Rizodegradación: degradación de contaminantes por bacterias en la rizosfera (Pseudomonas spp.) o la endosfera. Se han identificado numerosas especies de plantas que toleran y acumulan metales como As, Pb, Zn, Cr, Cu, Ni e incluso U.
Por ejemplo –
• Digitalis purpurea, Cistus ladanifer y Pinus pinaster acumulan As, Sb, Pb y W de forma eficaz.
• Holcus lanatus y Agrostis castellana son bioindicadores de Cu, Pb, Fe y Zn.
• Juncus effusus y Pteridium aquilinum acumulan Zn y Pb en zonas húmedas.
• Helichrysum stoechas e Hypochaeris radicata incluso toleran el uranio.
• Alyssum serpyllifolium, Linaria spartea y Lavandula stoechas hiperacumulan Ni y Cr.
Beneficios de la fitorremediación –
• Adaptación natural a suelos pobres y contaminados
• Bajos requerimientos de agua y nutrientes
• Alta biomasa para extracción o estabilización
• Uso potencial como bioindicadores para análisis agroecológicos y bioprospección.
Los hongos (especialmente los hongos micorrízicos) y las bacterias presentes en la rizosfera (p. ej., Pseudomonas, Rhizobium) también pueden mejorar la eficacia de la fitorremediación al promover la absorción y desintoxicación de metales pesados.
Por lo tanto, las estrategias de base biológica, como la fitorremediación ambiental de metales pesados, representan una oportunidad concreta y de fácil aplicación para la regeneración ecológica del suelo.
Con la combinación adecuada de plantas, microorganismos y técnicas agronómicas, podemos transformar sitios contaminados en entornos productivos sostenibles.
Francesco Di Lorenzo
